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FORD

El coche que unió a Carlos Sainz, un alce y una orquesta

¿Qué tienen en común un campeón del mundo de rallies, una joven que deja plantado a su novio engreído y un hombre en un laberinto de espejos?

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Pocos coches tienen el privilegio de haber acompañado a los conductores durante 20 años para hacer su día a día más seguro y más cómodo. El Ford Focus, que ahora presenta al mercado su cuarta generación, es uno de ellos.

Desde que en 1998 se lanzara su primera versión, han sido muchos los avances que han marcado cada nueva generación del Ford Focus. Diseño, seguridad y ayuda a la conducción han marcado la pauta de su evolución, siempre al alcance de cualquier conductor. Por eso ha convertido en compañeros de camino a personajes tan dispares como Carlos Sainz, un reno, una orquesta o un hombre perdido en un laberinto de espejos.

FOCUS I

1998

El Ford Focus que llegó para dar confianza, seguridad y libertad a sus conductores.

La primera generación del Ford Focus comenzó a rodar en 1998. Se trataba de un coche versátil, con una gran capacidad e innovaciones como el sistema de suspensión trasera independiente Control Blade, que supuso un importante avance en seguridad para su segmento y un gran alivio para este pobre alce (y su familia):

La versión WRC de este vehículo acompañó al piloto Carlos Sainz por rallies a lo largo y ancho del mundo. Eso sí: cuando Luis Moya no podía guiarle en sus paseos por la ciudad, tenía que llevar sus indicaciones grabadas en una cinta de cassette. Con la última generación del Ford Focus, esto no le habría hecho falta: el vehículo incluye un copiloto inteligente, el Ford Co-Pilot 360, que integra funciones como detección de peatones y ciclistas, sistema de evasión de obstáculos o de mantenimiento en carril.

No cabía duda: el Ford Focus había llegado para dar confianza, seguridad y libertad a sus conductores, sin importar su origen o circunstancias. Una misión que ha sabido mantener a lo largo de sus cuatro generaciones gracias al extraordinario control que ofrece durante la conducción.

Hoy se puede tener prácticamente todo lo que se busca en un solo automóvil

FOCUS II

2005

La segunda generación trajo consigo la máxima seguridad.

En 2005 se presentó la segunda generación del Ford Focus, que ganaba en espacio interior y presumía de una gran fiabilidad, con el aval que ofrecía en este sentido su precursor. El equilibrio era la pieza clave en el diseño de este vehículo. Tanto era así que Ford puso a una orquesta a interpretar una obra con piezas de la segunda generación de su Focus:

La segunda generación del Ford Focus obtuvo la máxima puntuación de las pruebas de seguridad EuroNCAP en el apartado de protección de ocupante adulto en caso de choque. Hoy, el nuevo Ford Focus trabaja activamente para evitar esas situaciones: su sistema de frenada activa utiliza un radar que alerta ante una posible colisión. Si el conductor no reacciona, el vehículo empieza a frenar para ayudarle a reducir la velocidad si circula por encima de 50 km/h. Por debajo de esta velocidad, entrará en funcionamiento la parada urbana activa.

Con la llegada de la tercera generación, Ford colocó su foco en la seguridad y las ayudas al conductor

FOCUS III

2010

La tecnología y las ayudas al conductor toman el protagonismo.

En el año 2010 se presentó la tercera generación del Ford Focus, un vehículo que ya incluía tecnología inteligente como un sistema capaz de cerrar automáticamente su parrilla frontal para aumentar la aerodinámica del vehículo. Otra importante innovación fue el sistema de aparcamiento asistido, una opción presente en la versión 2015, capaz de estacionar el vehículo de manera autónoma:

Por su parte, las versiones con transmisión automática de la generación 2018 del Ford Focus incluyen una versión mejorada del asistente de aparcamiento activo, capaz de estacionar en espacios en paralelo y perpendicular, o de desaparcar de espacios en paralelo. Al activarse, el vehículo controla la dirección, la aceleración, los frenos y las marchas. 

Además, su dispositivo de alerta de tráfico cruzado con freno activo resulta de gran ayuda a la hora de desaparcar marcha atrás el nuevo Ford Focus, que frena automáticamente si detecta el paso de un vehículo y el conductor no reacciona a los avisos del coche.

La última generación del Focus incluye nuevas ayudas al conductor, como el copiloto inteligente Ford Co-Pilot 360

FOCUS IV

2018

La última generación del Ford Focus incluye acabados diferenciados y adaptados a los gustos de cada consumidor.

La cuarta generación del Ford Focus ya está disponible en una versión especial lanzamiento que se podrá adquirir hasta el día 1 de septiembre.

El avanzado paquete de tecnología presente en el Ford Focus 2018 incluye múltiples opciones como las descritas, además de otras como accionamiento del vehículo mediante el smartphone, reconocimiento de voz, selección de modos de conducción, iluminación dinámica en curvas e incluso proyección de información sobre el parabrisas. 

El nuevo Ford Focus también gana en espacio interior y comodidad. Asimismo, incluye motores diésel y gasolina eficientes, como sus versiones 1.0 y 1.5 Ecoboost, capaces de conectar y desconectar automáticamente uno de sus cilindros para reducir el consumo y las emisiones.