Más del 70% de nuestro sistema inmune está en el intestino. Por eso, no es extraño que los nutricionistas defiendan que el estómago es nuestro segundo cerebro. De hecho, apuntan los expertos, hoy se sabe que hay más de 200 millones de neuronas en el intestino que se comunican de forma directa con el sistema nervioso central. Un ejemplo: el 95% de la serotonina, responsable de nuestro buen humor, se produce en el intestino. Ahora más que nunca cobra sentido eso de que “somos lo que comemos”, pero sabemos realmente cómo influye la alimentación y los hábitos de vida en nuestra salud.

Hacer ejercicio, dormir ocho horas y llevar una dieta saludable y equilibrada son las claves de una vida sana, pero en esta terna cada vez cobra más importancia cuidar nuestro sistema inmunitario. Tanto es así que el 74% de las personas mayores de 35 años están muy preocupadas por tener un sistema inmunitario fuerte. Compuesto por una red compleja de células, tejidos y órganos, el sistema inmune es el encargado de defender nuestro organismo de infecciones o sustancias extrañas, de prevenir enfermedades, proporcionarnos bienestar y disminuir los niveles de estrés y ansiedad.

El 74% de las personas mayores de 35 años están muy preocupadas por tener un sistema inmunitario fuerte

Entre todas esas células y anticuerpos que nos protegen en las tres barreras de defensa con las que cuenta el sistema inmune, la microbiota ha cobrado hoy una importancia fundamental. Seguro que has oído hablar de ella. No es que la inmunonutrición se haya puesto de moda, sino que estos más de 10 billones de microorganismos que colonizan el tubo intestinal son fundamentales para absorber los nutrientes de los alimentos y esta es la clave para mantener el funcionamiento del sistema inmunitario. Por eso, cuanto más diversa y equilibrada sea la dieta, más diversa será la microbiota.

Los lácteos, aliados del sistema inmunológico

El problema es que, según el estudio Ingesta y fuentes alimentarias en población española de ANIBES, los españoles tenemos una serie de deficiencias nutricionales que afectan a varias vitaminas y minerales que son clave para el buen funcionamiento del sistema inmunitario. De hecho, la población española solo toma el 39% de la vitamina D o el 50% de la vitamina B9, entre otras, que necesita al día.

Aunque no hay recetas mágicas, sí sabemos que huir del alcohol, la cafeína o las bebidas carbonatadas ayuda al sistema inmunológico, al igual que llevar una dieta con un buen aporte de frutas, verduras, legumbres o lácteos. “La leche es un alimento que juega un papel saludable en la alimentación por su propia naturaleza. La pauta de consumo de la leche y sus derivados está muy bien definida tanto en cantidades de consumo diarias (tres al día) como el mejor momento para incorporarlos, como el desayuno en el caso de la leche. Lamentablemente no se siguen estas recomendaciones y su consumo real está por debajo del establecido. Es por ello por lo que dotar a la leche de beneficios de salud adicionales está estrechamente relacionado con la mejora de la calidad de la dieta de la población. De esta forma, un consumidor puede aprovechar esa posición tan relevante que tiene la leche en la alimentación y cubrir otros beneficios adicionales como cuidar de su sistema inmune”, analiza Elena Garea, directora de Nutrición y Salud de Pascual.

Con este objetivo y teniendo en mente la carencia de vitaminas y minerales de la población española y su ingesta recomendada, la compañía ha puesto a la ciencia al servicio del sistema inmune para estudiar a conciencia los nutrientes esenciales que ayudan a reforzarlos y que flaquean en nuestra dieta, como son la vitaminas B9, B6, D y el zinc, así como otros nutrientes como la vitamina A, B12 y el selenio que se encuentran razonablemente en una alimentación equilibrada pero que por su implicación en el sistema inmune son básicos para reforzarlo.

El resultado de esta investigación es Leche Pascual Salud, un producto innovador y puntero en la industria que, gracias al I+D+i alimentario, ayuda y refuerza el sistema inmunitario de toda la familia. Para ello, la compañía ha unido la leche de bienestar animal, un alimento básico en nuestra dieta, con un extra de vitaminas y minerales fundamentales para reforzar el sistema inmune. El resultado es que el vaso de leche de siempre ahora también aporta el 60% de la vitamina B9, el 40% del zinc, el 43% de la vitamina B6 y el 32% de la vitamina D que necesitamos al día, más un 15% extra de vitamina B12, A y selenio. Y todo esto, además, con la sostenibilidad como estandarte, ya que Pascual sigue apostando por los envases más sostenibles del mercado con un 89% de materiales procedentes de fuentes renovables. “Aportamos más cantidad de los nutrientes con mayor déficit en la población y un buen porcentaje de los que ya se encuentran cubiertos, ya que todos ellos desempeñan un papel importante en el cuidado del sistema inmunitario”, explica Elena Garea.

Pascual ha desarrollado una leche para toda la familia que ayuda a cuidar nuestro sistema inmune

Porque si cada vez somos más conscientes de que somos los que comemos y de que dieta y salud tienen una relación directa, la alimentación del futuro apunta a productos cada vez más personalizados y ajustados al consumidor para mejorar su salud y sus hábitos alimenticios. Una nutrición personalizada que tenga a la investigación, la ciencia y la alimentación como bandera para huir de mitos y modas y para que, por ejemplo, ese vaso de leche que tomamos cada mañana nos refuerce por dentro y por fuera más que nunca.