Cinco consejos para ahorrar (casi) sin darte cuenta
Un error muy común es destinar el dinero que “te sobra” al final de mes para el ahorro. Cambia el chip y reserva una cantidad nada más cobrar tu nómina. ¡Funciona!
Con el comienzo de cada mes llega también el pago del alquiler o la hipoteca, los gastos de la luz, la factura del teléfono, el préstamo del coche, la comisión de la tarjeta de crédito… La mayoría de gastos fijos se concentran en los primeros días y no es casualidad. Es cuando las empresas saben que tenemos dinero en la cuenta. Antes del día 10 habrá volado una parte importante de nuestro salario. Será entonces cuando comenzaremos a contar los días que nos quedan para volver a cobrar. Además, con casi toda probabilidad, habrá pasado otro mes sin conseguir ahorrar ya sea para ese viaje soñado, esa reforma de la casa, planificar nuestra jubilación o afrontar cualquier gasto imprevisto.
Es en esas situaciones cuando nos damos cuenta de la importancia de ahorrar. O, como dice el refranero, solo nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena. Por eso, cambiar el chip es fundamental para integrar la cultura del ahorro y la planificación de nuestros gastos (ya sean necesarios o inesperados) a medio y corto plazo. De hecho, la pandemia ha hecho que empecemos a darnos cuenta de la importancia de adecuar nuestros gastos a nuestros ingresos, de analizar cómo cubrir nuestras necesidades y de reservar, si es posible, una parte para imprevistos para afrontar el futuro con más tranquilidad y seguridad. Precisamente, uno de los objetivos de la Fundación MAPFRE es concienciar a las familias de que, en la medida de lo posible, planifiquen sus gastos. Así estarán preparadas ante situaciones difíciles o para su jubilación.
Luis Pita, coach financiero, autor de Ten peor coche que tu vecino, uno de los libros de finanzas personales más vendidos en España y América Latina, y colaborador de la Fundación MAPFRE, señala que “el ahorro más eficiente es siempre el que menos esfuerzo implica”. Y, añade, el tiempo es el mayor aliado del pequeño ahorrador. “Cuanto antes empieces a ahorrar, más rápido crecerá tu dinero gracias al interés compuesto, entre otras cosas. Lo que ocurre es que ahorrar no es divertido y, mucho menos, hacerlo a largo plazo. La jubilación es algo que siempre veremos lejano, casi hasta el mismo momento de jubilarnos. Por eso tendemos a posponer el ahorro y a procrastinar con él”, explica.
Sin embargo, ahorrar vale para mucho más que planificar la jubilación. “Al empezar pronto matas dos pájaros de un tiro: planificas tu futuro y mejoras tu presente. Puedes ahorrar para tu jubilación y saber que eso te ayudará a ser más feliz hoy porque vives con menos estrés financiero. Además, conforme vas ahorrando y ves cómo tu libertad financiera crece, el estrés por el dinero disminuye y mejoran otros aspectos de tu vida: eres más feliz, tienes más confianza, normalmente trabajas mejor… Ahorrar es una de las formas más simples de ser feliz. Por eso, puedes pensar a largo plazo en la jubilación y ahorrar a corto plazo para ser más feliz hoy”, concluye el coach financiero.
“Ahorrar es una de las formas más simples de ser feliz”, Luis Pita, coach financiero
Ante esta realidad, la pregunta es cómo conseguir ahorrar sin dolor, especialmente porque, tal y como analiza Luis Pita, “cuanto más tengamos que hacer para ahorrar, más fácil será que fallemos. El motivo es que identificamos ahorro con renunciar a algo. Es la forma en la que trabaja automáticamente nuestro cerebro: preferimos gastar ahora que ahorrar para mañana”. Entonces, cómo cambiar esta idea preconcebida. Pita lo resume en cinco consejos a tener muy en cuenta.
Preahorra. Este es el consejo más importante y el más útil. ¿Qué es? Lo contrario al ahorro. Si ahorrar es guardar una cantidad de dinero a final de mes después de gastar todo lo que necesitas (o crees que necesitas), como hace la mayoría, el preahorro consiste en reservar una parte de tu dinero a principio de mes, antes de empezar a gastar. Así conviertes el ahorro en una prioridad y te aseguras de que guardas dinero todos los meses.
“Típicamente cobramos nuestro salario, pagamos las facturas, salimos a cenar y gastamos. El ahorro es lo que sobra al final de mes, que normalmente es poco o nada (y eso incluso si nos hemos propuesto ahorrar y hemos hecho esfuerzos para lograrlo). El preahorro cambia ese orden. Igual que pagas el alquiler, la luz o el teléfono nada más cobrar el sueldo, deberías hacer lo mismo con la parte que quieres destinar para tu ahorro. Para ponerlo en marcha sólo tienes que dar al banco una orden de transferencia con el porcentaje de tus ingresos que quieres ahorrar de la cuenta de uso diario a la de ahorro. Así ahorrarás de por vida”, asegura Luis Pita, quien, además, aconseja estas tablas para calcular cuánto deberías ahorrar al mes según tu edad y salario.
Automatiza todo lo que puedas. El primer paso es automatizar tu ahorro. Así evitas excusas y despistes. “Solo hay que hacer que esa orden de transferencia mensual sea periódica. Haz lo mismo con todas tus finanzas, incluida la inversión. Así, tu plan financiero seguirá en marcha sin depender de tu fuerza de voluntad. Es más, seguirá ejecutándose incluso cuando estás de vacaciones”, recomienda.
Ahorra tus subidas de sueldo (o por lo menos una parte). A lo largo de la vida es normal que tu salario y tus ingresos vayan aumentando. También lo es que ese aumento no se traduzca en un incremento del ahorro. La culpa lo tiene lo que Luis Pita denomina “la trampa del gasto creciente”, por la que cuanto más ganas, más gastas. “Una forma de combatir esta espiral es ahorrar la mitad de tus subidas de sueldo y hacerlo a principio de mes”. Este truco es muy potente y tiene dos ventajas, explica:
- Tu ahorro mensual crece de forma exponencial. Si empiezas desde joven, cuando llegues a la cima de tu carrera profesional ahorrarás mucho dinero.
- La alegría con las subidas es doble. Primero, porque ganas más y tienes más dinero para ti. Segundo, porque sabes que estás ayudando a construir tu libertad financiera más rápido.
Este mismo truco se puede aplicar a otros ingresos similares como la paga extra o los bonus por objetivos
“Cuanto antes empieces a ahorrar, más rápido crecerá tu dinero”, Luis Pita, coach financiero
Escoge bien tus batallas: reduce gastos de la forma más eficiente. Hay muchas cosas que puedes hacer para ahorrar, pero no todas tendrán el mismo impacto ni supondrán el mismo esfuerzo. “Acierta con estas batallas y tendrás buena parte de la guerra ganada”, aconseja. Pero, ¿dónde reducir gastos? Básicamente las áreas que menos te importan y con las que puedes ahorrar toda la vida con una sola acción. Un ejemplo es la factura de la luz, ahora tan de moda, o la tarifa del móvil. “Gastar menos electricidad no reduce mi calidad de vida porque es un gasto que no me añade felicidad. Por el contrario, dejar de salir a cenar un día a la semana con mi mujer, sí”.
Pita lo lleva a la práctica. Por ejemplo, reducir el gasto en electricidad es relativamente sencillo: revisa si tienes la potencia eléctrica que necesitas (o más) y buscar una buena tarifa. “Sólo con esos movimientos ya puedes ahorrar y mantener ese ahorro de por vida”, garantiza.
“Celebra” el Día de las facturas. Pita confiesa que no es un amante de los presupuestos. De hecho, cuenta que el suyo ni es muy detallado ni está siempre actualizado. Es otra de las ventajas de preahorrar. “Como a principio de mes separo el dinero del ahorro y la inversión, ya estoy tranquilo y no me importa tanto cómo se distribuya el gasto. Esto no quiere decir que no controle mis gastos. Como alternativa al presupuesto practico por lo menos tres veces al año el Día de las facturas. Es un día que reservo para sentarme con mis facturas para evaluar principalmente los gastos fijos y ajustarlos. Esto me permite reflexionar si estoy pagando un gimnasio para no ir o darme cuenta de que tengo suscripciones que no uso”, ejemplifica. El truco está en que cada vez que celebra el Día de las facturas trata de eliminar alguna o, por lo menos, ponerla en cuarentena. Es decir, suspender la suscripción al servicio un mes, por ejemplo, y ver cuánto lo echa de menos.
LAS VENTAJAS DE “VIVIR POR DEBAJO DE TUS POSIBILIDADES”
El coach financiero Luis Pita señala que la gran ventaja de no gastar todo lo que ingresas es que te permite ahorrar todos los meses. Además, vivir por debajo de tus posibilidades hace que te centres en lo que de verdad te importa y no en las apariencias. Esa es la tesis de su bestseller Ten peor coche que tu vecino (LID Editorial). “Cuando te enfocas en lo que es importante para ti construyes mucha libertad financiera y de forma más rápida. Esa libertad financiera, esos ahorros, son los que te dan seguridad y te permiten seguir con tu vida si hay una crisis o surge un imprevisto. Ese es el verdadero valor de vivir dentro de tus posibilidades”, resume el autor y coach financiero.