Cada día se extinguen 150 especies en el mundo (y así te afecta)
Los expertos alertan de que estamos ante la peor ola de pérdida de especies desde la extinción de los dinosaurios. Una realidad (preocupante) que deja claro que la buena salud de nuestros ecosistemas y de las especies con las que compartimos el planeta es fundamental
En el año 2000, el ganador del premio Nobel de química Paul J. Crutzen acuñó un término que, con el tiempo, acabaría adoptando buena parte de la comunidad científica: antropoceno. Con él se refería a la era en la que nos encontramos, en la que la influencia del ser humano sobre la tierra y el resto de seres que la habitan es tan grande que se contrapone con el llamado Holoceno, en la que nos encontramos a nivel geológico.
Los datos no tardaron en dar la razón a Crutzen. Apenas siete años después de poner encima de la mesa aquel término, y con motivo de la celebración del Día Internacional de la Biodiversidad, la ONU quiso poner el foco en la extinción de especies a causa de la acción humana. Y lo hizo con un dato tan contundente como preocupante: cada día se extinguen 150 especies al día, lo que se considera la mayor ola de pérdida biológica desde que desaparecieron los dinosaurios.
SOSTENIBILIDAD
NATURALEZA
COMERCIO DE PROXIMIDAD
RECICLAJE
CUIDADO DEL PLANETA
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Una mirada diferente comprometida con la imaginación y con el mundo que le rodea.
Así podríamos definir a Diego Ingold, un enamorado del teatro y del arte entendido como autorrealización. Donde cualquier otro ve un libro viejo, un cable pelado o una botella de plástico tirada donde no debía estar, él ve arte. Con esos materiales (rescatados y reciclados), el artista mallorquín nos anima en +Naturales a cuidar del medioambiente y, de paso, mejorar nuestra vida.
“El cambio climático y la pérdida de biodiversidad son las dos caras de la misma moneda”, señaló entonces el secretario ejecutivo de la Convención para la Diversidad Biológica de la ONU, Ahmed Djoghlaf, quien puso encima de la mesa un informe elaborado por expertos del Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático. Según aquel estudio, la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera del planeta se encuentra en un nivel nunca visto desde hace 650.000 años.
Una cuestión vital
La realidad es que, más allá de la alarmante extinción de especies y su demostrada relación con el cambio climático, la pérdida de biodiversidad supone un grave riesgo para la propia supervivencia del ser humano. El planeta funciona como una enorme y compleja maquinaria cuyos ecosistemas están íntimamente relacionados entre sí. Desde los océanos a los bosques tropicales, pasando por los ríos, los montes y los polos.
Ante ello, la pregunta es: ¿qué podemos hacer nosotros para proteger la biodiversidad de nuestro planeta, y más cercana, la de nuestras ciudades? Para responder a esta pregunta, lo primero que hay que saber es que la suma de los pequeños gestos de todos supone un gran cambio. Un ejemplo son los huertos urbanos, esos oasis verdes cada vez más comunes en nuestras ciudades (en la Comunidad de Madrid hay cerca de 60) que no solo ayudan a renaturalizar espacios degradados u olvidados de las urbes y a estrechar los lazos entre vecinos, sino que también sirven para fomentar una agricultura (y una alimentación) ecológica, crear espacios verdes donde se generen hábitats para la flora y fauna o ayudar a mitigar efectos como la llamada isla de calor, es decir el aumento de la temperatura de las ciudades a causa del asfalto y los edificios.
Otras formas sencillas de proteger y ayudar a recuperar la biodiversidad cercana a cada uno de nosotros pasan por ayudar a restaurar ecosistemas, por ejemplo plantando árboles; evitar tocar nidos y crías de animales que podemos ver en ciudades, parques, jardines o el campo; no llevándonos animales o plantas de áreas naturales; comprar muebles o productos con maderas que procedan de plantaciones sostenibles con certificado FSC; evitando el uso de pesticidas; no adquiriendo especies exóticas ni abandonando animales, evitar o reduciendo al máximo nuestro impacto en la naturaleza con gestos como no tirar basura ni hacer fuegos.
Si las acciones individuales son fundamentales para proteger la biodiversidad, también lo son las de las grandes y pequeñas empresas. En ese contexto, son cada vez más las compañías que deciden tomar conciencia de su responsabilidad y contribuir a proteger la diversidad en sus ámbitos de actuación. Con cerca de 16 millones de clientes, Naturgy es una de las que ha querido poner la biodiversidad en el centro. Entre las prioridades de la compañía, destaca el objetivo de respetar el capital natural, la biodiversidad y el patrimonio cultural en los entornos donde se desarrolla la actividad del grupo, identificando, valorando y realizando el seguimiento durante el ciclo de vida de las instalaciones, de los impactos y las dependencias sobre la biodiversidad. Del mismo modo, la compañía se fija como reto integrar la biodiversidad en el diseño y operación de los proyectos para reducir progresivamente los impactos ambientales negativos, evitando la afección a espacios protegidos, implementando un enfoque preventivo basado en la jerarquía de mitigación de impactos e impulsando el desarrollo de soluciones basadas en la naturaleza.
Todo ello se traduce en una meta: alcanzar la no pérdida neta de biodiversidad, promoviendo la creación neta de capital natural siempre que sea posible. Un desafío que pasa por la prevención, pero también por acciones concretas plasmadas en proyectos ambiciosos.
302 iniciativas verdes
A lo largo de 2021, Naturgy impulsó un total de 302 iniciativas enfocadas a la protección de la biodiversidad. Entre ellas las hay de toda clase, pero destacan las que trabajan directamente por la recuperación de especies que han sufrido el impacto de las transformaciones de su entorno y han visto mermada su población. Un caso paradigmático es el del cernícalo primilla, una rapaz migratoria cuyas poblaciones se han reducido drásticamente en las últimas décadas, y hoy es considerada como especie vulnerable. Junto con Grefa, el Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat, y en estrecha colaboración con las autoridades ambientales, Naturgy ha construido varios primillares acondicionados con cajas nido para alojar a 70 pollos. Animales que son criados en cautividad y alimentados mediante la técnica de hacking (sin que detecten la presencia humana) hasta que adquieren la madurez suficiente para ser liberados.
Otro ejemplo es la apuesta por las soluciones basadas en la naturaleza, como el pastoreo para el control de la vegetación bajo las líneas eléctricas. En colaboración con el Instituto Ourensano de Desarrollo Económico (INORDE), UFD, la distribuidora de electricidad del grupo Naturgy, ha realizado una iniciativa pionera que consiste en controlar esa vegetación, esencial para garantizar la seguridad, sustituyendo el empleo de maquinaria por ganado autóctono, lo que se traduce en un menor impacto en el medio ambiente al tiempo que se impulsa el pastoreo tradicional y el desarrollo rural.
En 2021, Naturgy impulsó 302 iniciativas enfocadas a la protección de la biodiversidad
Pero si hay una iniciativa que ejemplifica por sí misma la apuesta de Naturgy por mejorar el capital natural y compensar emisiones en su camino hacia la descarbonización esa es la creación del bosque Naturgy. Un proyecto de reforestación en Galicia utilizando especies autóctonas seleccionadas, que contará con la certificación internacional FSC, que garantiza la gestión del bosque con criterios de biodiversidad y beneficios para la población local.
DE ESTE CONTENIDO
El 50% de las personas implicadas en este contenido se mueven por sus ciudades en bicicleta
Todo el equipo que participa en este proyecto usa botellas de agua reutilizables
Los materiales utilizados para este vídeo son páginas antiguas del diario ABC de principios del siglo XX, libros de moda antiguos comprados en el Rastro de Madrid y libros de cuentas de economato de una cárcel abandonada de Palma de Mallorca
En la producción de este contenido se han emitido 0,01884 toneladas de CO², el equivalente a un viaje en avión Madrid-Barcelona o a un árbol absorbiendo emisiones durante un año. El 31,4% de las emisiones ligadas a la producción de este contenido se corresponden con la creación de los vídeos animados, mientras que la producción y el desarrollo del contenido ha supuesto un 68,6% de las emisiones totales. Naturgy, a través de la iniciativa #BuenaHuella, va a compensar el total de las emisiones producidas por el proyecto +Naturales.
Créditos
Prado Campos
Diseño UI y Dirección de ArteAlessandro Marra & Sofía Sisqués
Video ArtistDiego Ingold
MaquetaciónSaúl Fernández
Producción EjecutivaDelia Blesa