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La edad es solo un número: futbolistas para los que la espera ha merecido la pena

La historia del fútbol español está salpicada de ejemplos de constancia, esfuerzo y tesón por alcanzar el sueño de debutar en LaLiga Santander, incluso cuando parece que el tiempo corre en contra

Álvaro Piqueras

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Es un camino largo. Un recorrido lleno de cambios de sentido que solo unos pocos elegidos son capaces de completar. Debutar en las categorías profesionales del fútbol español, LaLiga Santander y LaLiga SmartBank, es un trayecto de esfuerzo y sacrificio que arranca a edades tempranas con la inocencia de quien disfruta mimando un balón mientras cultiva un sueño. Uno que la mayoría anhela. Uno que todos quieren cumplir. Uno reservado para unos elegidos.

Horas de complicidad entre hermanos en el pasillo de casa; un padre que recorre kilómetros en un descampado tras los lanzamientos de su hijo; unos amigos que se pasan el balón en una calle o plaza; un partido en el patio del colegio o con el equipo del barrio. La maquinaria comienza a engrasarse a lomos del talento, del trabajo y del compromiso. Comienza una etapa de formación en la que el fútbol se ubica en el centro de la existencia de miles de niños. Esa es la realidad de muchos futbolistas que actualmente militan en LaLiga Santander. Es cuestión de talento, de saber esperar, de carácter, de tesón, de entrega o de afán de superación. Para muestra, cuatro casos que se enmarcan en la de futbolistas que siempre miraron a las estrellas sin despegar los pies del suelo.

Cuatro casos de éxito

1

Jaime Mata

El ejemplo de Jaime Mata (32) es uno de los más llamativos porque no solo debutó en LaLiga Santander con 29 años después de ir quemando etapas desde las categorías que forjan luchadores, sino que además llegó a debutar con la Selección Española a los 30. Pero para llegar a la cima, el madrileño tuvo que atravesar una etapa formativa que curte y dibuja un carácter inquebrantable. Tres Cantos, UD Socuéllamos y CD Móstoles le mostraron la realidad de un fútbol en ocasiones poco agradecido pero muy edificante. Rayo Vallecano B y Lleida Esportiu, ya en Segunda División B (actual Primera División RFEF), le sirvieron para vislumbrar el fútbol profesional en el horizonte. En el Real Valladolid CF demostró que LaLiga SmartBank era solo un paso más en su escalada. Y en el Getafe CF confirmó que nunca es tarde.

2

Isaac Palazón

Isaac Palazón representa el caso de más rabiosa actualidad ya que ha debutado este mismo año en LaLiga Santander con 26 años tras un periplo apasionante que le ha llevado de su Cieza natal a jugar en el Rayo Vallecano. De los campos de regional a los más prestigiosos del territorio nacional sin olvidar que basta con creer para que los sueños se hagan realidad. Tras su paso por el equipo de su localidad y probar suerte en las categorías inferiores del Villarreal CF y del Real Murcia CF, fue en el primer equipo de este histórico del fútbol español donde comenzó a hacerse un nombre antes de recalar en la SD Ponferradina, club con el que logró el ascenso a LaLiga SmartBank en 2018. Gracias a su buen hacer, el Rayo se fijó en él como sustituto de Adrián Embarba, que ponía rumbo al RCD Espanyol de Barcelona a mitad de la temporada 2019/2020. Un año después lograría un nuevo ascenso, esta vez a LaLiga Santander, donde ya demuestra la calidad que atesora en sus botas.

3

Kike García

Por su parte, Kike García (31), un conquense de Motilla del Palancar, tuvo que hacer las maletas para terminar de labrarse una reputación en el Middlesbrough inglés después de despuntar en Murcia y llamar la atención de la SD Eibar para acabar debutando en LaLiga Santander en 2016. Un futbolista que ha sabido trasladar la impronta de una tierra de gente trabajadora a los campos de fútbol y cuyo esfuerzo sobre el terreno de juego es reconocido y apreciado allá donde va. Y si no que se lo pregunten a los aficionados del CA Osasuna, a los que ha conquistado con su habitual despliegue de energía tras abandonar el equipo vasco. Uno de esos futbolistas cuya labor callada es impagable.

4

Fali Giménez

Sin olvidar a otros como Fali Giménez (28), símbolo del cadismo y ejemplo de jugador despojado de toda parafernalia. De orígenes muy humildes, el valenciano debutó en 2020 en LaLiga Santander de la mano del Cádiz CF. Futbolista de barrio y de raza, ha pasado por todos los escenarios posibles del fútbol español y es sin duda uno de los jugadores más agradecidos y conscientes de que su realidad es la de un privilegiado. El filial del Levante UD, el Huracán de Valencia, el filial del FC Barcelona, y un doble periplo en el Nàstic de Tarragona ha sido el bagaje del jugador antes de ponerse a las órdenes de Álvaro Cervera, el técnico del Cádiz con el que el club gaditano llegó a LaLiga Santander tras ascender en la temporada 2019/2020. Con Fali como uno de los principales artífices.

Dos caras de la misma moneda

Alberto Cifuentes en una imagen de la pasada temporada.

Entre el caso de Luka Romero y el de Alberto Cifuentes hay un abismo. El primero, jugador mexicano nacionalizado argentino que debutó con el RCD Mallorca en LaLiga Santander a la tierna edad de 15 años, supone el más precoz de la historia de la competición, mientras que el del guardameta del Cádiz, que culminó el mismo logro a los 41, hace referencia al del jugador más veterano en estrenarse en la máxima categoría del fútbol español.

Son dos caras de la misma moneda y sin embargo realidades muy diferentes. Pero es algo que sucede prácticamente desde que el fútbol es fútbol. Sansón, Celta de Vigo (1939/40), Pedro Irastorza, Real Sociedad (1934/35), Óscar Ramón Pellicer, Real Zaragoza (1984/85), Kubala II, Espanyol (1964/65), Fabrice, Málaga CF (2012/13) o Puche II, Elche CF (1988/89), todos ellos menores de 17 años, encabezan junto a Romero, que actualmente milita en la Lazio de la Serie A italiana, el ranking de los jugadores más jóvenes en debutar. Y sin embargo es un listado al que cada vez con más frecuencia se unen jugadores. Pedri, Gavi o Ansu Fati, todos ellos del FC Barcelona, son muestra de ello. 

Pero también son varios los casos que, si bien no son tan extremos como el del cancerbero albaceteño del Cádiz, hablan de jugadores curtidos que vieron cumplido su sueño cuando su carrera futbolística estaba más próxima al final que al inicio. Txema Añibarro (35), en el Eibar, Armando Riberio (35) en el Cádiz, Jonathan López (33), en el Getafe, o más recientemente Enric Gallego (32) en Osasuna (actualmente milita en el CD Tenerife), forman parte de la otra cara de la moneda.

Mención aparte merece el caso del entrenador Vicente Moreno. En 2009, el Xérez Deportivo FC ascendió a LaLiga Santander otorgándole así al valenciano la posibilidad de debutar en la élite con 35 años. Sin embargo, el actual técnico Espanyol ya ha dirigido más partidos en la máxima categoría de los que fue capaz de disputar como jugador.

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